China 2011. Hangzhou: Templo Alma Escondida.

Domingo, 18 de septiembre de 2011. Después de almorzar y subir a la habitación a dejar las maletas, nos vamos hacia nuestra segunda visita.

Vamos a visitar al Templo de Alma Escondida. Es uno de los templos más importantes del sur de China. A la entrada "La Colina Voladora", con impresionantes esculturas budistas en piedra.  En estas zonas podemos encontrar unas 470 estatuas, en diferentes lugares de la colina.

La primera, según  entra a la izquierda, es la muestra de esculturas budistas, una réplica construida recientemente en cartón piedra, de las más famosas esculturas budistas de China. De valor más didáctico que artístico, no obstante puede ser un buen aperitivo para el que llega de tierras lejanas.

La segunda parte es la Colina Voladora. Tiene ese nombre  por un monje budista, que había peregrinado desde la India, dijo que la colina era semejante a otra que había visto durante su viaje. Lógicamente, sólo podría haber llegado volando, y de ahí su nombre. En ella, se esculpieron durante la dinastía Yuan más de 300 esculturas de Buda, verdaderamente magníficas de por sí, perfectamente conservadas, y semiocultas por una frondosa vegetación. Merece la pena cruzar el pequeño arroyo que las separa del camino y observarlas con detenimiento. Destaca entre las esculturas, la del Buda sonriente, una auténtica obra de arte.  Aprovechamos para sacar fotos, con la imagen del buda detrás.

La tercera parte es el Templo del Alma Escondida, que cuenta con 3 salas principales. La sala de los Guardianes Celestiales, tiene unas gigantescas esculturas de los 4 guardianes celestiales, una lámpara descomunal y un espléndido techo sobre el altar superior. En el camino hacia la segunda sala, el Salón de la Magnificencia, los fieles se arremolinan con sus ofrendas e incienso. Al fondo se encuentra la Sala del Maestro Medicina, con otro gran Buda y 12 discípulos.

Un mural donde se representa el ideal budista. Al oeste del templo se ha reconstruido recientemente la Sala de los 500 monjes que se llama Luohan que tiene Kongfu, son muy fuertes y famosos., con sus grandes esculturas de escayola. Es un lugar impresionante

Nos dejan tiempo para poder oír las oraciones de los monjes, mucha gente enciende incienso para sus plegarias, otros buscan la suerte intentando meter unas monedas en una especie de torre. Terminamos nuestra visita. A continuación un vídeo de un minuto donde podemos contemplar parte de una oración budista. Nos leemos.