India 2014: Pushkar.

Una vez más nos levantamos y nos preparamos para una nueva partida. Recorremos algunas zonas comunes del hotel Hadoti Palace, como la piscina y la zona donde el dueño tiene unos coches antiguos. El hotel aprovecha la temporada baja para hacer reformas. La verdad que está  bien, el mobiliario algo antiguo pero todo muy limpio y el servicio muy atento.

Antes de partir volvemos a detener para sacar la última foto del lago  Nawal Sagar y del Palacio y el Fuerte. 

Tenemos un recorrido de unas cuatro horas hasta llegar a Pushkar. Después de unas vueltas encontramos nuestro alojamiento, Bhanwar Singh Palace, impresionante resort a las afueras de la ciudad. Es el mejor alojamiento donde hemos estado en este viaje a cuanto a lujo e instalaciones. 

Una vez dejado las maletas en la habitación volvemos a salir hacia el centro de la ciudad. Pushkar es un lugar sereno y místico, está en el borde del desierto y a solo 11 kms de Ajmer, está separado por la montaña Pahar. La ciudad tiene el pequeño lago de Puskhar con numerosos ghats y templos de baño. Para los hindús es un centro de peregrinaje muy importante, en el que hay muchísimos Sadhus (personas en búsqueda espiritual). La zona es muy visitada en noviembre por la Feria de Camellos.

Antes de entrar al centro tenemos que pagar una tasa en una zona que me recuerda a las carreteras de peajes en Europa, pero aquí es un simple palo que cierra el paso tirado por una cuerda, sino recuerdo mal se paga 10 Rps por persona. El chófer nos deja en la entrada de la calle principal, que es peatonal y va paralela al lago con el mismo nombre de la ciudad. 

Caminamos hasta llegar al Restaurante Sun Set, que lo teníamos marcado en nuestra guía para el almuerzo. Comemos muy bien por buen precio unos 430 Rps las dos personas, unos 5,58€.

Luego volvemos a pasear por las calles infectadas de gente, de comercios y puestos que venden de todo. Como a los ghats es complicado entrar para sacar fotos decidimos subir a uno de los restaurantes ubicado en las azoteas de los edificios que están cerca del lago.

Desde la azotea podemos contemplar la vida que fluye alrededor del agua de este lago tan venerado por los hindús, mientras tomamos un cortado.

Volvemos a las calles y seguimos caminando hasta llegar al templo de Brahma el único templo dedicado a este dios en el mundo.

A las cinco y media de la tarde decidimos retirarnos y nos vamos al aparcamiento. Una vez en el coche nos dirigimos hacia el hotel, le comentamos a Bhupendra que nos vamos a quedar el resto del día en el hotel para aprovechar la estancia aquí. Por la noche cenamos en el hotel, la verdad que el servicio y la comida ha estado muy bien, el precio 1.195Rps. Luego nos retiramos a la habitación a tomar la última copa, Nos leemos. Día 13, domingo, 14 de septiembre de 2014.