Jordania 2009. Petra IV Parte.

Llegamos al restaurante, descansamos y vamos al servicio, sin pensarlo dos veces nos ponernos una vez más en marcha. Nuestro siguiente destino son las tumbas reales. Las tumbas reals son: la Urna, la Corintia y el Palacio. El calor es muy agobiante, primero paramos en unos de los bares terrazas de la zona, enfrente mismo de las tumbas, bebemos y nos comemos alguna fruta, en lo que nos pensamos si subimos o no. Nota: Las primeras tres fotos son de la Tumba de la Urna, luego la que esta al final donde estamos Inma y yo, es la Tumba del Palacio, y la que esta en Leer más, es la Tumba de Corintia.
Somos pocos los que vamos a visitar dicha tumbas. La llamada Tumba de la Urna es la primera de la serie de tumbas de Petra conocidas como las Tumbas Reales. Tiene una enorme sala interior, con un techo de colores, y fue utilizada como iglesia bizantina cuatro siglos después de su construcción. Tumba Corintia, otra de las tumbas reales.
Debe su nombre a los
capiteles corintios que coronan las columnas. En la sala principal hay numerosos nichos lo que ha hecho pensar que se trataba de un sepulcro colectivo. La tumba está muy deteriorada, su estilo es muy parecido a la tumba de El Tesoro. La última tumba que visitamos a pocos metros de la Corintia es la tumba del Palacio. Impresiona su inmensa fachada, también conocida como la tumba de los Tres Pisos, con claras influencias helenísticas. Una vez visitadas las tres tumbas volvemos hacia la terraza donde nos espera el resto del grupo. Aprovechamos que son cerca de las cuatro de la tarde para acudir hacia la tumba de El Tesoro, ya que nos ha comentado George, que es una buena hora para contemplar la tumba en su plenitud de color. Estuvimos un buen rato sacando fotos una vez a la fachada de El Tesoro. Hay poca gente, comenzamos el retorno hacia el centro de visitantes. La guagua nos recoge a las cinco de la tarde. Nos pusimos a hacer el tonto sacando fotos y posando por todo el camino de vuelta, mientras recorríamos el desfiladero As-Siq, que casi se nos escapa la guagua. Nos vamos al hotel, estamos un rato en la piscina, Bea, José, Inma y yo hablando, bañándose y descansando un rato, antes de prepáranos para ir a cenar.
Debe su nombre a los




No hay comentarios