Gran Canaria: San Cristóbal.
Hacía tiempo que no escribía una entrada sobre Rincones de
Gran Canaria, hace unos meses estuvimos en un barrio marinero llamado San
Cristóbal. Las capitales se valoran por sus infraestructuras, servicios,
ofertas de ocio y por su encanto, pues dentro de este último término debemos de
mencionar este rincón marinero, que nos permite desconectar de la ciudad dentro
de ella.
Si vienes del Sur de la isla es uno de los primeros barrios
que nos encontramos, está ubicado a la derecha, y si salimos de la ciudad lo
encontramos a la izquierda. Tiene una
avenida de unos 980 metros que se conecta a la Avenida Marítima, avenida
principal de la ciudad, Las Palmas de Gran Canaria.
Aparcamos el coche en la calle Marina, bajamos y llegamos a una pequeña playa de
arena, cerca del restaurante la Cofradía de Pescadores. A un lado tenemos el puerto pesquero, único
puerto pesquero en importancia de la capital.
Pasamos por una de las plazas donde está ubicado el
restaurante La Marea, preguntamos a dos vecinos donde se encuentra nuestro
destino, y nos dan las indicaciones oportunas. Llegamos a la avenida y vemos el
restaurante Los Botes. A la derecha tenemos una playa de piedra y a la
izquierda una plaza, es el comienzo de la avenida donde las casas de los
pescadores se agrupan al lado izquierdo.
Entramos en el restaurante Los Botes, comimos muy bien y buen
precio. Una vez que terminamos volvemos a la avenida.
Caminando llegamos al castillo, llamado antiguamente Castillo
de San Pedro Mártir ahora Castillo de San Cristóbal. La historia de este
castillo se remonta allá por el año 1577 cuando fue construido por el Capitán
D. Diego de Melgarejo y posteriormente reconstruido en 1638, participo en la
defensa de la Ciudad entre los años 1595 y 1599, hasta el 1878 tuvo un uso
militar.
Se trata de una torre redonda que fue construida dentro del
agua, sobre una gran roca a la que se fue revistiendo de argamasa. Por
ello, en el interior del castillo hay muy poco espacio. Ocupa una superficie de
219,04 metros cuadrados y tiene una escalera de 8,45 metros cuadrados y una
meseta de 2,10 metros (información obtenida en la web http://www.monumentalnet.org).
El 22 de abril d 1949 Fue declarado Monumento Histórico Artístico.
Volvemos sobre nuestros pasos, por esta maravillosa avenida
rodeada de casas de pescadores. Algunas calles estrechas nos invitan a pasear
entre casas, escaleras, esquinas y carreteras que nos permiten llegar al aparcamiento
donde teníamos el coche. Nos leemos.
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