China 2011: Kowloon.

Domingo, 25 de septiembre de 2011.  Día 27. Se nos termina el viaje, hoy es nuestro último día en China, pero aún tenemos unas cuantas horas para disfrutar del día.

Son las 11 horas y cogemos la guagua del hotel. Nuestro destino es la zona comercial de Kowloon. Nos bajamos en la parada Mongkok, y nos dirigimos a la calle Fa Yuen Street. El día esta lluvioso, pero de todas formas se ve mucha gente. Nos dirigimos a las primeras tiendas. 

Están montando un mercadillo, uno de los más grandes que he visto. Seguimos paseando y paseando, entrando y saliendo de tiendas. Al final terminamos comprando en el mercadillo después de regatear, y de algunos insultos o palabras de las vendedoras hacia nosotros, pero bueno seguimos.

Después de las compras volvemos al hotel caminando por la calle Argyle Street, terminamos comiendo una vez más en “Lucy’ kitchen”. La camarera nos mira con cara de angustia y llama a un chico que nos entiende, comemos muy bien. Seguimos camino al hotel y nos vamos a la habitación a preparar las maletas.

A las 18 horas hacemos el check out y cogemos la guagua K5, hacia la estación de metro. Nos cuesta colocar las maletas, la guagua es pequeña y no han colocado bien las maletas de los demás clientes, después de dedicarle unos minutos y la ventaja de jugar al tetric nos permite colocar las maletas. Una vez en la estación compramos la tarjeta que nos permite usar este servicio, Airport Express. Bajamos y cogemos el metro hacia el aeropuerto, con una duración de media hora.

Una vez que llegamos a la aeropuerto buscamos los mostradores de facturación, en la misma entrada podemos ver una pesa donde podemos comprobar el peso de las maletas y de esta forma organizar un poco el peso. Una chica nos ayuda a sacar las tarjetas de embarque en una máquina, y luego facturamos. Hablamos con la chica de facturación, nos pregunta donde esta Gran Canaria, y nos comenta que se quiere venir con nosotros, y yo tan ligero le digo “let’s go”. Pasamos los controles de seguridad. Una vez pasados nos sentamos a cenar y a conectarnos a internet con el portátil, la conexión es gratuita, ya deberían coger ejemplos otras ciudades. Esperamos nuestro vuelo, que sale a las 23 horas, aprovechamos el tiempo para hablar con la familia mediante el MSN. Nos leemos.