Siria 2009. Damasco, I Parte.

Lunes, 31 de agosto de 2009. I Parte

Estamos en Amman, nos vienen a recoger a las nueve y diez, para ir a visitar el centro de ciudad. Así que nos vamos a desayunar temprano y luego esperamos en el hotel. Comenzamos el día con la noticia que a nuestro grupo se nos une un nuevo grupo de veinte y una personas, del mismo turoperador pero de diferente programa. Una vez más se demuestra que los operadores no quieren dar un buen servicio sino ganar dinero.
Nuestra primera visita es el museo Nacional, este museo está alojado en una construcción del siglo XX. Una vez terminada la visita al museo, donde la sala que más no ha gustado es la dedicada a Palmira, paseamos un rato por el jardín entre diferentes obras de artes. A continuación seguimos hacia nuestra segunda visita, vamos a pie, a visitar una de las tres Caravanserai de la ciudad, son los locales en que paraban las antiguas caravanas que transportaban objetos susceptibles de comercio en la antigüedad. Amplios recintos con patio central en que descansaban las mercaderías y las bestias con un piso superior en que descansaban los mercaderes. En perfecto estado, albergando actualmente a comerciantes y artesanos, donde visitamos a uno de los artesanos que usa una tejedora, con su gran puerta de madera y sus dos pisos, con las arcadas de piedra. Luego continuamos hacia la guagua (autobús), donde después del recuento, se da cuenta que falta una persona, Beatriz. El guía va a buscarla, estaba esperando en el museo donde había perdido el contacto con el grupo cuando fue a comprar.

Nos deja en la entrada del mercado cubierto, donde habíamos paseado la noche anterior. El guía nos comenta que si queremos cambiar dinero, al otro lado de la calle tenemos una caja de cambio. Para llegar al otro lado tenemos que ponernos en la piel de los ciudadanos de Damasco para cruzar la vía, yo me pego a uno de los ciudadanos y sigo sus pasos para poder cruzar, esto es la jungla, nos paramos en la vía, los coches pasan a mi lado, otra parada más, otro paso, otro coche, esquivas y al final llegas al otro lado, los pasos de peatones aquí son de decoración.

Cruzamos la siguiente vía por un paso subterráneo que nos lleva a la entrada de la zona del mercado cubierto, donde podemos contemplar muchos comercios de todos los tipos, y donde podemos encontrar cualquier cosa. Una vez que cruzamos dicho mercado llegamos a la calle Derecha y a la Mezquita de los Omeyas.

La Calle Derecha, conocida como Vía Recta, se menciona en la Biblia como el escenario sobre el cual se produjo la conversión de Saulo, y es ello una de las causas de que se considere a Damasco "cuna de civilizaciones y pesebre de religiones". Visitamos el Mausoleo de Saladino, se encuentra en el lado izquierdo de la mezquita, ha sido un héroe para árabes y sirios. Salah al-Din murió y fue enterrado en un primer momento en la ciudadela de Damasco para que luego, su hijo, un gobernante de Damasco, mandó a construir este mausoleo. Luego vistamos la Mezquita de los Omeyas, primero las mujeres y los hombres con pantalones cortos se tienen que poner unas túnicas, y luego todos nos tenemos que quitar los zapatos. Una vez que entramos contemplamos el imponente patio. Podemos contemplar los rezos sin problema. Es una de las más antiguas y grandes del mundo. Se encuentra en la ciudad vieja de Damasco y es famosa por albergar el sepulcro con la cabeza de Huséin bin Alí, nieto del profeta Mahoma y, según se dice, los restos de San Juan el Bautista. Poco a poco nos vamos conociendo todos los que formamos el grupo, sobre todo los 14 que estamos juntos desde el primer día, hablamos con Antonio, de Málaga; Marga y David, de Madrid; y Felipe y Charo, de Santander; el grupo también lo forman Alex y Ali, que viven en Mallorca.