Barcelona 2009. Las Ramblas.

Día 6 de febrero de 2009.

Esta es nuestra primera visita a la ciudad condal, Barcelona. Después de un vuelo tranquilo y puntual, con una duración de unas tres horas, llegamos a Barcelona, ya desde el aire podemos comprobar la buena planificación de la ciudad.

Una vez que recogemos el equipaje, nos dirigimos a un punto de información turístico, a continuación nos vamos directo a la parada de guagua (bus), sacamos los billetes en un pequeño cajero que hay en la misma parada, cada ticket cuesta 4,25€, siempre es más económico que coger un taxi. Las guaguas son de color azul, su primera para es dentro de la zona del aeropuerto, luego para en la Plaza de España, a continuación en Gran Vía, y la tercera en la Plaza de la Universidad, que es nuestra parada, nos bajamos y nos dirigimos a la calle San Antoni, desde allí nos vamos al hotel Splendid. Dejamos las maletas y salimos a conocer la ciudad, la primera impresión del hotel es muy buena.

Lo primero de todo es ir a buscar las entradas para el partido del domingo entre el Barça y el Sporting, la vamos a retirar en unas oficinas sitiadas en la calle Las Ramblas de Cataluña. Las entradas las habíamos sacado por internet uno días antes. Ahora nos dirigimos hacia Las Ramblas, cogemos el metro en la Diagonal y nos bajamos en Liceo (línea 3). Aprovechamos para acercarnos al mercado la Boqueria, es alucinante los puesto, sus colores, los olores, la gente, es decir todo. Los olores nos a abierto el apetito y nos vamos a comer.

Paseamos Las Ramblas hasta la Plaza de España y luego hasta el monumento de Colón donde subimos para observas las vistas panorámicas de la ciudad a 52 metros de altura. Nos vamos hasta la Catedral, esta en obra y parte de la fachada esta tapada, pero bueno la rodeamos y paseamos por las calles de alrededor, y podemos contemplar la exquisitez de la arquitectura de las casas. Bueno ya va siendo hora de una tapita y una cerveza. Seguimos paseando por las calles de esta ciudad que nos ha impresionado, ya nos vamos dando cuenta porque es una de las ciudades más bonita de España y Europa, y aún no hemos visto nada. Después de tanto caminar nos retiramos al hotel.